• Casillas del Monopolio

  • Juagadas anteriores

  • Escribe tu dirección de correo electrónico para suscribirte a este blog, y recibir notificaciones de nuevos mensajes por correo.

    Únete a otros 2 suscriptores
  • Los jugadores

Entrando en el gran Tablero Virtual

Sobre nuestra cyborg existencia y los retos de expresa.la

El miércoles pasado tuvimos la oportunidad de asistir a la emocionante inauguración del expresa.la, un espacio virtual dedicado a la conversación latinoamericana en torno a las nuevas ideas sobre el derecho.  expresa.la es una apuesta hermosa por conectar el pensamiento jurídico de eso que llamamos “Latinoamérica”, y sincronizarlo con la nueva inmediatez de los lenguajes virtuales, que favorecen la reflexión de ideas progresistas, de cambio y acción desde el escenario de lo jurídico. Detrás de cómo expresa.la se muestra, existe una imagen potente que desarrolla en concreto la necesidad por explotar nuestra cyborg vida; aquella que como en la mejor metáfora de Haraway nos recuerda que somos mitad humanos mitad monstruos cibernéticos[1], y llevamos una memoria portátil en la USB – sin que la metáfora biológica sea una casualidad-, construimos nuestra identidad mediante el traslapo de nuestros múltiples perfiles de las redes sociales, acompañamos a nuestros amigos y a nuestra familia por messenger y nos hemos acostumbrado a “sentir” ( ) en un nuevo lenguaje emocional artificial y ficticio: aquel que está metido en este cuadro en el que escribo, que me chupa la vida todos los días, pero que es también ahora casi una parte orgánica de mi misma. Es conectar la dimensión académica a esa realidad de sujetos escindidos en que nos hemos convertido (mitad “reales”, mitad “virtuales”), y vincular el debate legal al lenguaje y la realidad de este otro nuevo mundo.

expresa.la es parte de eso. La apuesta aquí es establecer redes de conocimiento amplias que superen las fronteras artificiales que nos han separado, y capitalice nuestra nueva vida cyborg en la reflexión en torno a lo que hacemos. expresa.la es un medio informal para que pensemos alto en nuestra voz virtual, y podamos potenciar las ventajas del nuevo mundo electrónico que nos conecta en un segundo a miles de kilómetros del espacio. Es consolidar la idea de que la distancia para el conocimiento no existe, e irnos acostumbrando a que cada vez (nosotros, y sólo nosotros) tenemos menos límites, menos fronteras y menos dificultades para pensarnos y construirnos. Ahora todo está aquí…google it!

Esa nueva ventana es un reto importante para todos. Ese mismo miércoles, mientras escuchaba a Oscar Vilhena hablar sobre la viabilidad del Estado de Derecho en contextos de pobreza, pensaba en el desafío epistemológico que incluye este tipo de proyectos. Pensaba en que una nueva red latinoamericana de pensamiento jurídico tiene que traducir esa necesidad de la inmediatez y la practicidad de la comunicación en un nuevo discurso jurídico, que se fugue de las tradicionales  discusiones etéreas en torno a “un derecho que no suena”, un derecho metafísico, una academia sorda. expresa.la es la representación de un derecho que es, de un derecho que sirve, de una comunidad jurídica con activistas que piensan en el derecho como instrumento de cambio, como posibilidad de desestabilizar y construir “en los márgenes”. En nosotros está el reto de que expresa.la no sea más de lo mismo con una nueva fachada.  Tenemos que construir un correlato de la virtualidad en la epistemología, que de cuenta de cómo estamos pensando lo que hacemos para un presente construido dentro de las coordenadas de lo inmediato y lo útil; eso es lo que realmente está pendiente por expresar.


[1] Dentro del Manifiesto para Cyborgs: ciencia, tecnología y feminismo socialista a finales del siglo XX, los Cyborgs son para Haraway la metáfora teórica y política que ilustra su proyecto. Con la referencia a estos cuerpos cibernéticos, Haraway quiere representar el carácter intervenido de los sujetos posmodernos, entendidos como productos de la interacción de las tecnologías con las diluidas imágenes de los dualismos orgánicos y virtuales.

Lina F. Buchely